Historia de San Roque

La Escuela Secundaria nace para dar respuesta a la comunidad educativa y brindar educación a alumnos provenientes de la escuela Primaria del mismo complejo educativo en el año 2000. Por su parte el Instituto de Idiomas funcionaba previamente y en el año 2005, ambas modalidades: Auxiliar Bilingüe Escuela Secundaria comienzan a forman una sola unidad académica dando lugar a lo que hoy se constituye bajo el nombre de Escuela de Educación  Secundaria Orientada Particular Incorporada N° 3015 San Roque.
Es por ello que a fin de conocer sus orígenes debemos recordar el nacimiento de dicha escuela de la mano y bajo la protección de nuestro querido párroco Padre José Gunter, a quien debemos toda esta obra evangelizadora.

ASÍ COMENZÓ NUESTRA HISTORIA.....

Era un soleado domingo estival de un 4 de Enero de 1948, cuando arribó el Padre José Gunter a este querido barrio Sargento Cabral, para tomar posesión como párroco de su primera parroquia, que bajo la advocación de San Roque se inauguraba en ese mismo día.
Lo asaltaron pensamientos pesimistas, al ver tanta pobreza en el vecindario, que no contaba con ninguna calle asfaltada. Cuando se encontró con lo que debía hacer de templo parroquial lo invadió una amarga tristeza. Había estado en el suntuoso templo de Ntra Sra Del Carmen y anteriormente en el monumental templo de El Trébol, donde ejerció dos años y ahora debía resignarse a algo tan reducido. Cuando vino el padre a visitarlo desde Rafaela, se expresó de esta manera: “Pero te dieron poco de iglesia…” Para colmo, lo poco que había, estaba mal hecho y había que pagarlo, como fruto de un préstamo, con intereses a cubrir.
Pero con la lozanía de su juvenil sacerdocio y bajo el ímpetu del Divino Espíritu el Padre José puso manos a la obra y fue descubriendo gente llana y de muy buena voluntad. Empezó a caminar y recorrer casa por casa, conociendo así a la grey que se le había confiado. La fatiga por conocer a su querido rebaño, estaba compensada por la amabilidad y cariño con que recibían al aprendiz de párroco.
El pequeño salón capilla, al poco tiempo demostró la mezquindad de su capacidad, ya que la aglomeración de los concurrentes obligaba a pensar en la amplitud del templo definitivo. Había que hacer un plan, para la realización de una gigantesca obra. Se puso como lema la siguiente consigna: “lo difícil no es igual a imposible” y con la confianza puesta en el Señor pusieron manos a la obra. Fue entonces, cuando comenzaron con las famosas kermesses, entretenimientos benéficos y rifas alegrando el barrio con sus altavoces, portadores de alegría y comunicando fe y confianza al populoso barrio Sargento Cabral, que ya vislumbraba la concreción de la soñadora obra.
Restaba mucho por terminar semejante obra, pero con el entusiasmo del vecindario las paredes ya se habían erigido y los grandes ventanales ya eran otra realidad. Al principio se usaba el templo a medio terminar, porque así lo exigían las circunstancias.
En la pujanza de las múltiples iniciativas, surgió al poco tiempo, dar cabida a la escuela parroquial, cuyo comienzo fue también muy pobre. Un casi doméstico Jardín de Infantes abrió la senda, para encaminar lo que sería hoy una gran escuela, que nunca declinó en el crecimiento de la población escolar. Ese desarrollo gigantesco e incontenible obligó a dividir el antiguo salón-capilla en tres aulas y largo de los años se fueron adquiriendo propiedades contiguas a fin de conformar esta amena casa que es hoy la ESCUELA SAN ROQUE

Entrevista a Mirta Vivas DE Sanabria, La primer Maestra

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